¡Ya es mañana, ya es mañana!

Cuba y Cayo Lara, ahora en serio

17/02/2009

La ironía es una figura literaria que consiste en decir una cosa, querer decir exactamente la contraria, y conseguir que se entienda. De ese contraste entre las palabras y las ideas surge el humor que generalmente acompaña a la ironía. Ayer, el coordinador general de Izquierda unida, Cayo Lara, dijo en una entrevista en El País que en Cuba «tienen elecciones, sólo que con partido único«. Lo terrible y lo triste de la frase es que, pudiendo haberlo sido, no es una ironía, sino que refleja fielmente lo que nuestro coordinador general piensa de Cuba. En su día dije que iba a mantener la lealtad con él, a pesar no haberle apoyado, y creo que hay que las críticas, para ser leales, hay que explicarlas, y no dejarlas en un simple chascarrillo, de ahí la necesidad de esta nueva entrada. Ayer escribí una entrada claramente irónica sobre el tema, hoy quiero escribir un poco más en serio, porque creo que debo responder a los muchos comentaristas que legítimamente me piden ciertas explicaciones, entre ellos, y especialmente, don Rafa Hortaleza.

Creo que Cayo Lara respondió mal a la entrevista de El País en las preguntas que le hicieron sobre Cuba. Estoy convencido de que cuando Lara dice que en Cuba hay «elecciones, pero con partido único» está haciendo un daño casi irreparable a la memoria de un partido al que el mismo pertenece, que desarrolló durante décadas una lucha heróica y titánica en favor de la libertad y del pluralismo político, sin el cual no hay democracia alguna, ni en Cuba, ni en Rusia, ni en España.  Y me refiero al Partido Comunista de España. Además, teniendo en cuenta que cuando Izquierda Unida habla de este tema, tiene fijos todos los ojos y todos los oídos en sus palabras, creo que cualquier intervención de cualquier lider de nuestra formación sobre el tema debe comenzar con una afirmación clara, concisa y que responde a la realidad: «Cuba es una dictadura porque sus ciudadanos no son libres de elegir entre opciones políticas diferentes, y condenamos ese hecho crucial«.

Y a partir de ahí, hacer todas la explicaciones, comparaciones, excepciones que se quiera, porque sobre todo ello se puede debatir, pero lo que no se puede cuestionar -salvo por una mente muy enferma o muy ciega- es ese hecho principal y que salta a la vista. Fíjense ustedes que, salvo la respuesta a la primera pregunta, el resto de ellas, tomadas aisladamente, me parecen muy puestas en razón. El problema es que si no se dice antes que Cuba es una dictadura, y se condena, y además, se dice todo lo contrario, pues se pierde absolutamente la razón, que es lo que ha ocurrido, porque todo queda descontextualizado.

Y no voy a decir más, porque en realidad, la entrada de ayer comentaba la entrevista de Cayo Lara y no pretendía profundizar en el tema concreto de Cuba, sobre el que he hablado en varias ocasiones, y acerca del cual, como no ha cambiado nada, no tengo nada nuevo que decir.

Dicho queda.