¡He visto la luz!

Yo sigo siendo rojo... ¿y ustedes?

20/09/2010

Sé que se anda rumoreando por algunas covachas y cloacas que si ahora soy verde. Pues desmiento de plano los rumores: sigo siendo rojo, pero independiente, y esa independencia -ya no rebusco en la página de IU para ver si mañana me voy a ganar alguna bronca por lo que escriba hoy aquí- me ha hecho más rojo todavía, fíjense ustedes. Hay otro menda por esos mundos de Dios del que se rumorea también que es verde, don Juantxo López de Uralde, pero yo, qué quieren qe les diga, pues le veo también más bien rojo. Hoy le ha hecho a Gabilondo -que el hombre cada vez está más tieso- unas cuentas acerca de la necesidad de tres planetas para abastecer a todos los humanos si todos los humanos consumiésemos los recursos al ritmo que los consumimos en occidente, y acerca del 20 por ciento de la población del planeta, que consume el 80 por ciento de los recursos, y a la vez, y sin pestañear, considera que hay que luchar contra el hambre -desde el Burguer King, se entiende-. Esos cálculos y otros similares son, creo los cálculos que hubiese hecho Marx, aquel rojo, si viviese hoy y calculase hoy. En fin, no quiero decir más, de momento, así que les dejo con esta otra entrevista, más sectorial, pero igualmente interesante, de la que me pone sobre aviso mi querido amigo don Jordi.
Diario Responsable– La protección del medio ambiente es forma parte de la columna vertebral de la denominada Responsabilidad Social de las Empresas(RSE). Cree usted que las grandes empresas, como las del IBEX, hacen RSE motu proprio? Cuales son sus motivaciones?

Juantxo López de Uralde.- Me parece que lo que las empresas hacen en materia ambiental es, en general, insuficiente. En el tema ambiental tenemos un factor en contra que es el tiempo. Por ejemplo en la lucha contra el cambio climático hace falta acelerar la reducción de emisiones. Me parece que estamos muy lejos de poder decir que se está haciendo lo necesario. Además las organizaciones empresariales (CEOE a la cabeza) son un lastre que dificulta cualquier movimiento, ya que se oponene a cualquier avance legal en materia ecológica.